Ya nadie recordaba. La memoria se vaciaba y no encontraban manera de remontarse al pasado para poder construir el presente. Ese presente que los agobiaba.
Los recuerdos se iban deshojando y acababan arrastrados por el viento.
Imposible recomponer las piezas del rompecabezas.
María Graciela Kebani
No hay comentarios:
Publicar un comentario